UN POCO DE HISTORIA: PASADO, PRESENTE Y FUTURO DEL ESCAPE ROOM
Para llegar al pasado del Escape Room como tal, no debemos retrotraernos más allá de apenas una década. Llamado en un principio Real Escape Game o REG, su creador fue el japonés Takao Kato, un guionista y director de anime y cine.
Situada en Kyoto, la compañía de Kato edita una revista que distribuye gratuitamente. El autor se basó en juegos point and click para llegar a concebir el REG en 2007. A partir de ahí, se extendió como la pólvora la afición a los escape room, llegando a Singapur en 2011. 
Según otros aficionados a la historia de este juego de escape, su inicio se dio en Silicon Valley; lo cierto es que a partir de 2011, las salas se multiplicaron por el mundo, presentándose nuevas modalidades y juegos en donde la tecnología relacionada con lo audiovisual está presente.
Por su parte, el también japonés y amigo de Kato, Kazuya Iwata, condujo los juegos de escape hasta San Francisco. En este momento, los juegos se basaban mayormente en enigmas de tipo lógico.
El húngaro Attila Gyurkovics fundó en 2011 en Budapest Parapark, franquicia basada en los juegos de escape. Gyurkovics ha asegurado que su idea no partió del anime japonés, sino de sí mismo… valiéndose de su práctica como entrenador personal y aplicando al juego la teoría del flujo de Mihály Csíkszentmihályi, también llamada flow.
Podría definirse este término como un estado particular de la persona, en el cual la relajación y el disfrute se asocian con el desarrollo de acontecimientos que se suceden sin descanso. El jugador, en este estado, está absolutamente centrado en el juego, involucrado en un mundo nuevo, atractivo y totalmente diferente.
Una particularidad de esta versión, es que fue la primera en que se utilizaron llaves ocultas y candados blindando salidas estratégicas.
Más tarde, en 2012, un físico suizo creó para sus alumnos un juego de escape con connotaciones científicas.
Esta versión fue un punto de inflexión en la historia de los escape room, pues a partir de entonces fueron utilizados los códigos invisibles y dispositivos científicos básicos, pero de gran interés tanto didáctico como lúdico.
A partir de 2012-2013, las salas de escape fueron popularizándose por todo el mundo, contándose por millares. Lo cierto es que, al principio o durante los primeros años, significaba un seguro negocio, ya que no había que realizar una gran inversión y, mayormente, la dificultad de la creación del negocio radicaba en la imaginación a la hora de plantear los enigmas, la ambientación de los diferentes escenarios…
Pasado ya el tiempo, la gran proliferación de salas de escape ha hecho que algunas hayan cerrado o hayan descendido en su número de asistentes. ¿Las razones? Básicamente, la mayor competitividad y la proliferación de nuevas tecnologías asociadas a imágenes, sonidos…
Como es lógico, el avance de los dispositivos electrónicos holográficos, sensoriales, etc., han hecho que ciertas salas hayan quedado atrás en cuanto a posibilidades y, por tanto, desfasadas.
Las mejores salas de escape room son aquellas en la que, a la imaginación de los acertijos y enigmas, las acompaña tecnología, instalaciones de primera y una seguridad total en todos los aspectos.
El tema de seguridad es muy importante, y los responsables de las salas de escape room lo tienen muy en cuenta. Muchas de las personas que acuden a estos juegos, no las tienen todas consigo y creen que pueden entrar en un ataque de pánico o no pasárselo precisamente bien.
A este respecto, hay que recordar la figura del gamemaster. Se trata de un guía que, en la propia sala, se ocupa de conducir a los participantes. En este tipo de juegos es muy importante ir de buena gana y no estar de mal humor o no predispuesto.
Una de las reglas que suele ser común a todas las variedades de escape, es que si uno de los jugadores abandona el reto antes de concluir el tiempo (por lo general, una hora), se detendrá el juego y todo habrá acabado.
EL FUTURO DEL ESCAPE ROOM
Los especialistas coinciden en que el futuro del escapismo será realmente excitante. A partir de ahora, la rentabilidad de este negocio se dará por la profusión de nuevas tecnologías aplicadas al ámbito.
Las gafas de realidad virtual serán uno de los elementos de más relevancia durante los próximos años para ciertas salas de escape room. Su esencia deberá permanecer, o sea, la toma de decisiones a partir de una situación determinada, así como la resolución de enigmas…pero no será lo mismo si están presentes imágenes virtuales de un hiperrealismo que insufla potencia y credibilidad a la acción.
Uno de los problemas de la tecnología en las salas, es que cuando el juego basa su ambientación en efectos visuales, sonoros..., los costes de la producción serán muchos mayores.
Por otra parte, algo muy negativo para el desarrollo del juego, es que fallen los dispositivos informáticos, haciendo que tanto gafas de realidad virtual como otros complementos de última generación supongan un obstáculo más que una ventaja.
Sin embargo, se prevé que con el paso de los años la tecnología audiovisual esté presente de una forma más fluida y con recursos ante posibles fallos eléctricos, informáticos o de otro tipo. Todo ello sin prescindir de la esencia del escape room, sin relegar, por supuesto, la imaginación.
De hecho, la originalidad de las historias es y será una de las características primordiales de este juego, así como la variedad de enigmas y acertijos. Los enigmas son el alma del escapismo, enigmas que hay que resolver en grupo o por parejas.
Las salas de escape tienen que estar preparadas para satisfacer a públicos muy diferentes, por eso de ahora en adelante triunfarán más aquellas que sean versátiles e integren varias salas para diferentes tipos de público, desde niños a adultos amantes de los sobresaltos, el terror o la fantasía en estado puro.
Podemos decir que, a la hora de plantear una historia en una sala de escape, los escritores y guionistas han de ponerse manos a la obra para no repetir situaciones, escenarios, escenas… lo que no es nada fácil.
De hecho, parte del futuro del escape room apunta a una combinación entre cine y escape. ¿Cómo se sentirán los asistentes siendo, ellos mismos, los protagonistas de una película? Las historias posiblemente estarán más desarrolladas, se compliquen y, como decimos, los efectos especiales resultarán espectaculares y presentes en todas o casi todas las salas de escape.